Espumas limpiadoras
Espumas limpiadoras se caracterizan por su fácil aplicación y lo agradable que resulta sobre la piel. Los desmaquilladores en forma de espuma se pueden clasificar en una
categoría intermedia entre los jabones suaves y las leches desmaquillantes. Son suaves como una loción y, en el momento de aplicar, se aclaran con agua. Son infinidad los laboratorios que las elaboran, y en la actualidad existen espumas específicas incluso para pieles con rojeces. Ofrecemos espumas limpiadoras de las firmas cosméticas de farmacia más reconocidas, con
la mejor calidad del mercado y a un precio atractivo.
Espuma limpiadora para la cara
La espuma limpiadora facial es un
agradable y eficaz producto que podemos adquirir en la farmacia para nuestra rutina de limpieza diaria. Sus características principales son las siguientes:
- Los limpiadores faciales en formato de espuma están especialmente indicados en el cuidado de las pieles sensibles, ya que normalmente no incluyen ni alcohol ni perfumes de ningún tipo.
- Consiguen retirar con eficacia todo el maquillaje y además también retira los restos de suciedad y grasa acumulados a lo largo del día.
- Además su fácil aplicación, hace que este tipo de productos sea uno de los mejor valorados del mercado y de los que más nos gusta elegir a las mujeres.
El gel resulta la opción ideal para una piel mixta o grasa. Este cutis se caracteriza por el exceso de producción de sebo que, sumado a la polución y el maquillaje, acaba por obstruir los poros. Resultan necesarios productos limpiadores astringentes que dejen la piel mate sin llegar a resecarla. En este caso, están contraindicadas las cremas y leches limpiadoras así como productos con alcohol. Por el contrario, los compuestos que mejor les funcionan son las espumas y geles faciales.
Cómo aplicar la espuma limpiadora
Este tipo de productos es de muy
fácil aplicación, tan sólo se debe aplicar mediante un ligero masaje y dejar actuar durante cinco minutos.
Pasado ese tiempo se debe aclarar con agua para retirar todo el producto y los restos de suciedad de la piel.
Algunos vienen directamente en formato espuma, tipo mousse, otros en cambio vienen en un formato crema o loción que al aplicarlo se convierte en espuma.
En estos casos será más apropiado aplicar la espuma
sobre la piel humedecida, para conseguir una mejor aplicación del producto.
Se tendría que aplicar una pequeña cantidad del producto en las manos y frotar suavemente la piel del rostro hasta conseguir esa textura de la espuma tan característica.