Gel de Baño

Gel de Baño

El gel de baño es el producto con el que limpiamos nuestra piel cada mañana al ducharnos. Existen muchos tipos de geles de baño que están indicados para diferentes tipos de piel. Por lo general son recomendables aquellos geles de baño que posean componentes de tipo natural y aceites esenciales.

Comprar Gel de baño sin parabenos

Cuando compramos un gel de baño buscamos que sea suave al tacto y que tenga un aroma delicado. Pero no solo debemos fijarnos en eso, ya que le gel de baño es el encargado de limpiar nuestra piel, y por tanto debemos comprar un producto que se adecúe a nuestro tipo de piel en cada momento. Si sufres de piel seca o atópica hay geles en crema que ayudan a tratar tu tipo de piel. Del mismo modo que si tienes excesiva sudoración, o buscas un extra de hidratación. Podemos encontrar geles de baño que incluyan propiedades reafirmantes o regeneradoras, así como geles específicos para aplicar en la ducha después de haber estado expuestos al sol, ya que incluyen un componente de after-sun. Cada vez son más habituales los geles de baño que incluyen entre sus componentes aguas termales, lo que les añade una propiedad curativa, relajante y favorecedora del bienestar.

Diferentes tipos de gel de baño Online

Geles de baño con diferentes aceites para aquellas pieles que son más secas, o geles relajantes que ayudan a liberal las tensiones acumuladas gracias a la mezcla de fragancias y aceites relajantes. También podemos encontrar geles exfoliantes que arrastran todas las células muertas de nuestro cuerpo dejándolo suave. Cuando vemos diferentes tipos de gel, para niños, para pieles sensibles, para las pieles castigadas por el sol, debemos fijarnos en sus propiedades. Puedes elegir un gel en mousse si tu piel es delicada y te gusta la textura suave de este tipo de geles. Las opciones son muchas, los hay más líquidos y más espesos. Muchos son básicos perfectos para mantener el pH neutro de nuestra piel y otros contienen unas características que proporcionan diferentes sensaciones. Algunos geles de ducha están indicados para su uso en la ducha de la mañana, ya que estimulan el riego sanguíneo y te ponen en marcha. Otros en cambio son más relajantes y son perfectos para utilizar al final del día, liberar estrés y descansar plácidamente.