Protección solar infantil
Protección solar infantil. Mientras nosotros somos conscientes de la necesidad de protegernos contra los rayos del sol, ellos sólo piensan en divertirse, meterse en el agua y jugar hasta que caen agotados.Es recomendable la aplicación de protección solar en cualquier época del año. Los filtros solares protegen la piel de quemaduras, potencialmente cancerígenas, y se puede tomar un baño de sol con tranquilidad.
Se trate de una piel clara u oscura, dispones de protectores solares -con filtros físicos o protección química-, sticks labiales y los imprescindibles aftersun, indicados para una hidratación y reparación de la piel después de una exposición al sol para la protección solar infantil.
La importancia del protector solar infantil
Es nuestro deber proteger sus delicadas pieles de las radiaciones solares, porque las consecuencias de las quemaduras pueden ser muy graves. Existen en el mercado numerosos productos a nuestra disposición para el cuidado de la piel de nuestros pequeños. Las líneas de protección solar para niños se diferencian de las cremas de adultos en la ausencia de perfumes, y su base de formulación es menos agresiva con la piel para prevenir posibles irritaciones o alergias.
Debemos tener en cuenta que los bebés de menos de 6 meses, aunque pueden utilizar cremas solares, no son muy recomendables debido a que su piel es aún muy sensible. Además cualquier exposición prolongada al sol no es deseable en bebés de corta edad.
Protector solar niños, elige el mejor
Lo mejor es evitar exponer a los niños directamente al sol durante las horas de más calor. Aún así, siempre hay que darles crema protectora. En cuanto al factor de protección,en caso de duda, elige siempre el más alto.
El factor solar recomendable para los niños debe ser igual o superior a 30. Tenemos que tener en cuenta que la piel infantil es más delicada que la de los adultos, pues produce menor cantidad de melanina que la defienda.
Puedes elegir diferentes tipos de aplicadores para el protector solar de tu hijo, en spray, geles, barras, aceites, lociones, etc., aunque los más recomendables son las leches y cremas, debido a que contienen agentes hidratantes en su composición.
Los productos infantiles están creados especialmente para cuidar la piel de los niños, normalmente son soluciones resistentes al agua que añaden un grado de tranquilidad sabiendo que siguen protegidos aún estando en la piscina o en el mar. Pero siempre debemos volver a aplicársela una vez que han salido del agua para reforzar la acción de la crema protectora.
Recuerda que lo mejor es aplicar la crema unos 20 minutos antes de la exposición al sol para que vaya penetrando en la piel.