Consejos de Belleza

Confinamiento y protección solar

Confinamiento y protección solar

Si lees el título «Confinamiento y protección solar», es posible que te preguntes qué relación existe entre ambas cosas, y eso es lo que trato de explicarte en este post.

  • Este año marcado por la pandemia del coronavirus Covid’19, exige precaución  extra a la hora de exponernos al sol.
  • La primavera es la época del año que sirve de transición entre el frío invernal y el intenso calor del verano.
  • Así mismo, es la estación del año, en la que nuestra piel comienza a prepararse progresivamente para tomar el sol. Sin embargo, este año 2020 estará marcado por la pandemia del coronavirus Covid’19.
  • A principios del mes de marzo, se decreta un  estado de alarma  que ha conllevado un estricto confinamiento durante aproximadamente tres meses.
  • Los meses de confinamiento han coincidido con esta etapa de transición, en la que los paseos, sirven para que nuestra piel se vaya adaptando progresivamente al aumento de la intensidad de la radiación solar.
  • Esto va a provocar, que nuestra piel esté extremadamente sensible, ya que no hemos podido adaptarnos de forma progresiva a una radiación que cada vez, es más intensa y mas perjudicial.

Confinamiento y protección solar

         

Debemos prestar especial cuidado a proteger nuestra piel tras el confinamiento

Debemos prestar especial cuidado a proteger nuestra piel tras el confinamiento

                       

  ¿Cómo se explica esta relación entre confinamiento y protección solar?

  • La melanina es el pigmento que se encuentra en ciertas células de nuestro cuerpo, y que es el responsable no solo de nuestro color de pelo y de ojos, sino también del tono de nuestra piel.
  • Esta sustancia (la melanina),  tiene la función de protegernos contra los rayos ultravioletas, al mismo tiempo que es la responsable de que nos pongamos más o menos morenos.
  • Para llevar a cabo estas funciones debe ser estimulada y activada, y esto es un proceso progresivo que se produce por la propia exposición solar.
  • Lo ideal es que nuestra piel tenga un acercamiento o contacto gradual con los rayos UV.
  • Es importante prepararla para la exposición de forma progresiva para evitar correr riesgos para nuestra salud como quemaduras, manchas, fotoenvejecimiento y cáncer de piel.
  • Debido al confinamiento estricto coincidiendo con la primavera, esta exposición progresiva no ha sido posible.
  • Por eso hay que ser prudentes a la hora de exponernos, sol sí, pero siempre con protección y mejor si antes preparamos la piel.

¿Cual es el verdadero motivo que establece la relación entre el confinamiento y protección solar de forma extraordinaria?

Por más que nos pese, la verdadera salud de la piel está en manos de nuestras células, del metabolismo interno y de los muchos procesos fisiológicos que dependen, sobre todo, de nuestros hábitos de vida.

Dentro de estos procesos está  la estimulación de la melanina y su engrosamiento progresivo para protegernos de la radiación solar.

¿Misión imposible esta temporada?

No, si tomamos las precauciones necesarias, y además las extremamos poniendo en práctica, cuanto antes, los tratamientos internos y externos de la piel para poder prepararla para el sol.

Comenzamos con la preparación interna

Existen alimentos y sustancias que favorecen la estimulación de la melanina:

  • El alimento estrella en este sentido, es la zanahoria, por su contenido en caroteno.
  • Le siguen el tomate, la sandía, los arándanos, frambuesas…, por su elevada presencia de licopeno.
  • Arroz o lácteos son alimentos ricos en aminoácidos favorables para la formación de la melanina.
  • Frutos secos, como las nueces, ricas en vitamina E, nos ayudarán a mantener intacta nuestra piel y coger un bonito bronceado.
  • Algunos pescados como el atún, rico en vitamina D, una de las principales responsables de que luzcamos un bonito moreno.
  • Y mi recomendación EXTRA-ESPECIAL: NUTRICOSMÉTICOS, entre los que sin ninguna duda destacaría:       Heliocare bronze

          Heliocare 360 D plus

          Heliocare Ultra D

          Heliocare oral sticks Junior

Continuamos preparándonos por fuera

  • Exfoliar la piel: Con el fin de eliminar las impurezas y células muertas y limpiarla en profundidad. Para el rostro y también para tu cuerpo, puedes utilizar un exfoliante suave con  efecto purificante, peeling y calmante.
  • Hidratar en profundidad: Aplicar una mascarilla hidratante y nutritiva que devuelva la suavidad a tu piel de forma semanal, e hidratación a diario con una crema hidratante corporal adecuada.
  • Protección: Proteger la piel del sol es fundamental en cualquier momento del año y en cualquier lugar.

 

El sol nos da vida, pero puede convertirse en nuestro peor enemigo, yo confío en Heliocare y su extensa gama de productos, con diferentes líneas, formatos y texturas.

Una Marca de Fotoprotección de referencia para los profesionales que, gracias a su innovadora tecnología Fernblock® protege de las 4 radiaciones solares, neutraliza los radicales libres y repara el daño solar por fuera y también por dentro

Fernblock® es el activo base de HELIOCARE®. Es un exclusivo extracto estandarizado de Polypodium Leucotomos con una potente acción protectora, antioxidante y reparadora que funciona tanto por vía tópica como por vía oral.

Sus principios activos actúan en las cuatro radiaciones (UVB, UVA, Visible e IR) y evitan tanto sus daños inmediatos (quemaduras) como los que surgen con el paso del tiempo: envejecimiento de la piel, manchas, pérdida de defensas, alergias e incluso cáncer de piel.

Sus diferentes presentaciones en distintas texturas, hacen que exista un fotoprotector Heliocare indicado para cada tipo de piel

Consulta siempre a tu farmacéutico si tienes alguna duda, y no dejes que el sol cause estragos en tu piel.

Recuerda que la radiación solar produce daños que, aunque no sean visibles, son acumulativos.

La utilización de un protector solar de calidad desde la infancia, es la única garantía de evitar enfermedades en la piel.

 

«Autocuidado, Salud y Belleza»

Por Inmaculada Vicente María